🎯 Objetivo: Identificar los peligros viales comunes y evaluar los riesgos específicos de las operaciones de la empresa.
Humanos:
Factores relacionados con el comportamiento del conductor o los demás actores viales.
Ejemplos: conducción distraída (uso del celular), fatiga, agresividad, falta de experiencia.
Ambientales:
Factores externos que afectan la seguridad.
Ejemplos: lluvia, niebla, pavimento en mal estado, zonas escolares, animales en la vía.
Vehiculares:
Riesgos derivados del mal estado del vehículo.
Ejemplos: frenos desgastados, llantas lisas, luces dañadas, falta de mantenimiento.
Como conductor, es fundamental que puedas reconocer los riesgos específicos a los que estás expuesto según el tipo de recorrido y condiciones en las que trabajas. Esta evaluación personal te ayuda a tomar decisiones más seguras y prevenir accidentes.
Debes tener en cuenta:
Tipo de ruta que recorres:
Las vías urbanas presentan riesgos como tráfico denso, peatones y motociclistas. Las rurales pueden tener curvas cerradas, iluminación deficiente o animales sueltos.
Horario de conducción:
Conducir de noche o en horas pico aumenta el riesgo por visibilidad reducida, fatiga o estrés del tráfico.
Tipo de vehículo que manejas:
No es lo mismo conducir una motocicleta que un camión o una van. Cada uno tiene puntos ciegos, tiempos de frenado y maniobrabilidad diferentes.
Condiciones del vehículo:
Antes de cada jornada, verifica frenos, luces, llantas, espejos y niveles de fluidos. Un pequeño fallo puede convertirse en un gran riesgo.
Tu nivel de experiencia y estado físico:
Evalúa si conoces bien la ruta, si estás descansado y en buenas condiciones para conducir con atención.
Situaciones pasadas:
Reflexiona sobre incidentes anteriores. ¿Hubo señales de alerta que podrías haber anticipado? ¿Qué aprendiste de esas experiencias?
Recuerda: La conducción segura comienza con una buena evaluación de tu entorno y de ti mismo. Entre más consciente estés de los riesgos, mejores decisiones tomarás en la vía.
La conciencia situacional es la capacidad del conductor para observar, interpretar y anticipar lo que sucede a su alrededor mientras conduce.
Requiere estar alerta, libre de distracciones y con buena capacidad de observación.
Permite tomar decisiones rápidas y seguras ante peligros repentinos.
Es clave para la conducción defensiva y la prevención de accidentes.
1. Menciona al menos tres peligros viales comunes que has observado en tu experiencia diaria como conductor. ¿Cómo crees que podrían evitarse?
Por favor, escribe al menos 15 palabras.
2. Describe una situación en la que identificaste un riesgo en la vía antes de que ocurriera un accidente. ¿Qué hiciste para prevenirlo?
Por favor, escribe al menos 15 palabras.
3. ¿Por qué es importante mantener una buena conciencia situacional al conducir? ¿Qué haces tú para estar más atento en la vía?
Por favor, escribe al menos 15 palabras.
¡Gracias por responder! Puedes continuar con la evaluación final.